Cada segundo jueves de octubre, se conmemora el día mundial de la vista, con la finalidad de invitarnos a reflexionar en cómo cuidamos la salud de nuestros ojos. “Éstas fechas, son fundamentales para concientizar a las personas sobre la importancia de la vista y cómo hacer para mantenerla de la mejor forma, preservándola. Cuando se le pregunta a la población en general cual es el sentido más importante, la gran mayoría responde que es la visión, porque el 80 % de la información que nos llega, es a través de la vista”, indicó Raúl Etchepare, médico oftalmólogo.

Así mismo, “estas jornadas revisten de gran significado  para que la sociedad visibilise problemas que normalmente no vemos. En el mundo hay 40 -45 millones de personas ciegas y si el 80 % de ellos, hubiese recibido a tiempo tratamientos oportunos, incluso un porcentaje alto de ellos, si recibieran actualmente un tratamiento podrían recuperarla porque, aunque parezca increíble una de las causas más altas de pérdida de visión, es la catarata”, señaló Etchepare, docente FCM-UNL.

Pautas para una consulta temprana en niños y adultos

Al respecto, el médico oftalmólogo, Tabaré Bay consignó, “el primer control oftalmológico de un niño, tiene que ser al nacer, para asegurar que éste tiene el sistema visual en condiciones para poder desarrollarlo y madurarlo correctamente. A partir de este primer control, los siguientes van a ser para evaluar el avance de maduración de este sistema visual. Después entrando a la etapa de la niñez hay un control que se exige, que es el control de niño sano en el ingreso preescolar. El control, en este momento es para que el niño desarrolle una adecuada función visual y esta no afecte en su educación”.

Posteriormente, “los controles visuales, deben hacerse una vez al año, tanto en niños como en adultos jóvenes y adultos para poder detectar oportunamente cualquier tipo de alteración visual”, manifestó Tabaré Bay, docente FCM-UNL.

Cuidar la visión frente al estudio/trabajo remoto

El oftalmólogo Raúl Etchepare recomienda:

* “Evitar esfuerzos innecesarios en nuestra vista. Debemos tener la corrección adecuada para no obligar a nuestros ojos a realizar un esfuerzo mayor que el necesario.

* Mantener una distancia de lectura cercana adecuada, de 35 – 40 cm.

* Realizar descansos periódicos cada hora aproximadamente, dejar de fijar la vista y hacer alguna otra actividad.

* Dormir el tiempo suficiente para que el ojo pueda recuperarse de las agresiones que tiene durante el día, por ejemplo la regeneración y reparación del epitelio de la córnea.

* Iluminar bien el objeto que estemos mirando, pero sin que haya reflejos y sin que la luz incida directamente en nuestros ojos.

* Colocar el monitor y el teclado alineados justo delante de los ojos.

* Intentar reducir el brillo al necesario y evitar que se generen reflejos en la pantalla,

* Usar el tamaño personalizado, según nuestra necesidad.

* Parpadear para lubricar los ojos”.

Alteraciones visuales frecuentes 

En primer lugar, Bay aclaró “la mejor herramienta de la promoción en salud visual, es la información sobre la existencia de enfermedades visuales frecuentes y la prevención a través de la consulta anual, al consultorio especializado en oftalmología”.

En esa línea comentó, “las alteraciones más frecuentes son las refractivas, es decir, aquellas alteraciones que nos pueden disminuir o alterar la visión. Las mismas, se pueden corregir con la prescripción de lentes y entre ellas encontramos el astigmatismo, la miopía, la hipermetropía y la presbicia. El astigmatismo, la miopía y la hipermetropía tienen un factor hereditario muy importante, pero también tienen un factor ambiental, que tienen que ver con el desarrollo de estas enfermedades a partir de algún  factor externo que las pueda desencadenar. Con respecto a la presbicia esta alteración visual, es fisiológica, que se desarrolla alrededor de los cuarenta años y progresa con la edad”.

“Además existen enfermedades propias del ojo como es el glaucoma, una enfermedad irreversible que lleva a la ceguera si no se instaura un tratamiento a tiempo y adecuado. También hay otras, que están asociadas a enfermedades generales como por ejemplo puede ser la retinopatía hipertensiva secundaria, la hipertensión arterial o la retinopatía diabética secundaria a la diabetes. En todas estas, ya sean las refractivas, las propias del ojo o las secundarias de enfermedades generales, hay factores tanto genéticos como ambientales que contribuyen al desarrollo de las mismas”.

Acciones que desarrolla la FCM

Desde la Facultad de Ciencias Médicas de la UNL “se vienen realizando unas salidas a terreno en las cuales se va a distintos colegios y se hace una toma de la agudeza visual de los alumnos de estas escuelas. Es decir se testea si los estudiantes, tienen una agudeza visual adecuada para su edad, en caso contrario se los deriva.  Además, se llevan adelante unas charlas de promoción, donde se educa al alumnado sobre las pautas de salud visual y sobre cómo cuidar la salud de los ojos. Esto se realiza en el marco de una práctica de extensión de educación experiencial,  que tiene lugar en el primer año de medicina y donde además de los docentes de la Facultad, participan pasantes de años superiores”, finalizó Tabaré Bay.