El Día Mundial de la Enfermedad de Chagas se conmemora, desde el 2020, el 14 de abril. El mismo, fue propuesto por la Organización Mundial de la Salud (OMS) con el objetivo de dar visibilidad a las personas afectadas por el Chagas y a efecto de sensibilizar a la sociedad sobre ella. Así mismo, con la intención de poner en discusión, en los distintos niveles, los recursos e intervenciones necesarias para su prevención, control y para poder avanzar hacia su eliminación.

Según la Organización Mundial de la Salud, en nuestro país, hay unos 3 millones de personas con infección por Chagas en estadio crónico y cada año nacen alrededor de 1.300 niños y niñas con Chagas connatal, es decir, transmitidos desde la persona gestante al feto durante el embarazo.

La enfermedad de Chagas es una de las llamadas "enfermedades olvidadas" o "desatendidas", a pesar de continuar siendo una afección global. “Por eso es importante recordarla, y atender a que la base de ambas cuestiones no es otra cosa que la invisibilización de su relevancia tanto en el plano político, como muchas veces, dificultades en la accesibilidad a los controles, al diagnóstico y al tratamiento a nivel del sistema de salud. También desde lo simbólico, puesto que el Chagas se hace carne en las complejas tramas de la vulnerabilidad y se alimenta de ella, sino se le presta atención. Por eso es un desafío permanente para todos los actores que trabajamos en salud, ya que, para erradicar su persistencia, debemos tener en cuenta las condiciones que la signan desde sus determinantes sociales, además de su complejidad en términos de las causas y consecuencias de la enfermedad (fisiopatología), que ha requerido y continuará requiriendo el trabajo conjunto y colaborativo de distintas disciplinas”, aseveró Luz Rodeles, especialista en Medicina Interna, doctora en Ciencias Biomédicas y docente FCM-UNL.

El Chagas, se ha extendido a lo largo de los años en más de 21 países de Latinoamérica siendo una enfermedad endémica en estas regiones. Sin embargo, ahora también es un problema de salud global, ya que en los últimos años su distribución se ha ido extendiendo a otros países como, por ejemplo, España, Francia, otros países de Europa, Estados Unidos, Canadá, así como también en países de Asia y Oceanía. Esto se relaciona con la mayor movilidad de la población y las migraciones. “En estos países donde no se conocía la enfermedad, empezaron a aparecer casos relacionados a transfusiones y muchos casos de transmisión connatal dado que el sistema de salud no estaba "alerta". Por este motivo, es una condición que afecta hoy la salud no sólo en nuestra región, sino que también a nivel global. Se estima que aproximadamente 65 millones de personas están en riesgo de contraer la enfermedad en todo el mundo”, precisó Rodeles.   

Vías de transmisión

La enfermedad de Chagas-Mazza es una infección producida por un parásito que se denomina Trypanosoma cruzi. “Se transmite por diferentes vías, de las cuáles la más conocida por todos es la picadura de un insecto que se alimenta de sangre humana y de mamíferos que es la vinchuca. Sin embargo, también puede transmitirse a través de la placenta (durante el embarazo, desde la mamá a su bebé) así como por vía oral a través de la ingestión de alimentos crudos en los que pueda haber restos de estos insectos, común en Brasil donde se ingiere jugo de caña de azúcar, por ejemplo”, explicó Rodeles.

Para luego agregar, “además, puede transmitirse cuando se realizan transfusiones sanguíneas o trasplante de órganos, si no se conoce que la persona donante tiene Chagas. En nuestro país esto ya no sucede porque hace más de 30 años que se aplica un control especial de Chagas, pero sí ha sucedido recientemente en otros países donde no conocían la enfermedad. Así, el Chagas afecta a muchas personas, pudiendo ser causa de lesiones en algunos órganos como el corazón y el intestino, aunque en los últimos años se sabe que se trata de una condición sistémica, es decir que también puede generar efectos en el sistema inmunológico y a nivel del metabolismo”.

 Acciones en FCM-UNL

Desde el año 2013, la Facultad de Ciencias Médicas de la UNL, a través de un equipo de investigadoras e investigadores desarrolla líneas de investigación en torno a la enfermedad de Chagas. “Este grupo, que integra el Centro de Estudios en Salud Global, trabaja interdisciplinariamente y en colaboración permanente con otros grupos de trabajo de larga trayectoria de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas (FBCB) como el Laboratorio de Tecnología Inmunológica (LTI) que desarrolla líneas de investigación relacionadas a la formulación de vacunas preventivas y terapéuticas, así como métodos diagnósticos. También es importante mencionar que la UNL cuenta con un grupo muy importante como es el Centro de Investigaciones en Endemias Nacionales (CIEN) dedicado especialmente a enfermedad de Chagas, en FBCB, que ha hecho aportes relevantes a la epidemiología, al diagnóstico, al tratamiento y al control de la transmisión de la enfermedad a través de la vinchuca”, afirmó Rodeles. 

Actualmente, desde el Centro de Salud Global, “desarrollamos dos líneas de investigación, una sobre alteraciones metabólicas en pacientes con enfermedad de Chagas que ha explorado cómo la infección crónica por este parásito puede generar anticuerpos que contribuyen a dificultades en el metabolismo favoreciendo un estado que llamamos de insulinoresistencia que es en sí mismo un factor de riesgo cardiovascular, pudiendo predisponer a condiciones como la diabetes. Esto fue un tema de estudio original, que constituye un aporte a la fisiopatología de la enfermedad, pero también a la visión de la salud, dado que permite resaltar la importancia de la prevención de riesgo cardiovascular en los pacientes con Chagas. Es importante mencionar también que en estas investigaciones participaron alumnos de medicina, como cientibecarios y pasantes que se fueron formando en investigación y han presentado en eventos científicos sus resultados”, referenció Luz Rodeles.

Por otra parte, “estamos desarrollando junto al LTI-FBCB, un método diagnóstico para poder detectar la infección en los bebés hijos de mamás con Chagas de manera sencilla, con bajo requerimiento de recursos, a través de una tira reactiva que se pueda utilizar "al pie de la cama" del paciente.  En este sentido, hemos hecho desarrollos previos que se han publicado también en el diseño de un ELISA (enzimoinmunoensayo indirecto) que dió las bases para poder pasar a la plataforma de la tira reactiva que consideramos que sería una contribución muy importante, ya que permitiría mejorar la accesibilidad al diagnóstico en cualquier lugar, sin necesitar tecnología, ni personal especializado. También en Chagas connatal estamos trabajando desde hace 3 años con el Programa de Chagas de la provincia realizando un relevamiento anual de los casos de transmisión para conocer el estado de situación en nuestra ciudad y mejorar el seguimiento de los niños.  Estamos participando también en una colaboración con una organización internacional FIND Diagnostics para una tira reactiva para infección crónica”, mencionó la investigadora Rodeles.

Así, en este día, recordamos y visibilizamos las necesidades de las personas afectadas por la enfermedad de Chagas, así como a todas aquellas en riesgo de contraerla, con la mirada y la acción dirigidas a tenerla presente en los diferentes niveles de atención de nuestro sistema de salud, apoyando también el desarrollo de las investigaciones e intervenciones necesarias para mejorar la accesibilidad al derecho a la salud”, concluyó.

Cabe señalar, que en la FCM integran el equipo de chagas, la Dra. Luz María Rodeles (docente de Fisiología), el Dr. Miguel Vicco, el Dr. Iván Marcipar, el Dr. Iván Bontempi y el Dr. Gabriel Cabrera (docentes de Inmunología). También conforman el grupo del proyecto CAI+D 2020 recientemente aprobado el Bioing. Pedro Tomiozzo, la Lic. Andrea Ducasse, el Bioing. Lucas Costa de FCM y la Dra. Nazarena Pujato y la Lic. Luz María Peverengo (FBCB) con quienes se trabaja en colaboración.