A partir de una capacitación realizada en el mes de abril, los docentes del Área de Emergentología de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNL fueron acreditados como instructores en atención cardiovascular de emergencia por la Asociación Estadounidense del Corazón (American Heart Association - AHA).

La AHA cuenta con programas de entrenamiento en distintos países. Se trata de cursos de soporte vital básico (primeros auxilios o reanimación cardiopulmonar), entre otros. Las formaciones están destinadas tanto a la comunidad como a los profesionales que intervienen en equipos de salud. “Los cursos son eminentemente prácticos. Se pretende que las personas aprendan destrezas. La reanimación cardiopulmonar consiste en comprimir el torax, ventilar y trabajar en equipo --para el caso de quienes están en el área de la salud--. Y eso se aprende haciendo. Estos cursos ponen al alumno en la situación de simular casos. Los cursos son videoguiados y orientados por un instructor. El alumno hace o imita lo que el video le propone y la evaluación es teórico – práctica. Los cursos están hechos para que el alumno aprenda tranquilo. La idea es que, llegado el momento, pueda salvar la vida de la persona que está frente a él”, cuenta el instructor de la AHA Fabián Gelpi. 
La necesidad de realizar el curso a través de las normas de la American Heart Association (AHA) nace desde la FCM porque existen protocolos de trabajo que emanan de esta Asociación y son respetados en todo el mundo. El Prof. Méd. Horacio Locatelli, quien se encuentra a cargo del área de emergentología de la FCM, destacó la importancia de la formación ya que “en muchos países del mundo que trabajan seriamente con este tema, a cualquier médico que quiera ingresar a una residencia se le solicita una certificación AHA o de otras asociaciones internacionales. Siempre fue una idea de la disciplina de emergentología que nos teníamos que abrir a ese tipo de sociedades porque son muy serias, dictan normas y tienen en su interior un trabajo ordenado y coordinado durante muchísimos años”, dijo. “Eso hace que sus contenidos sean revisados periódicamente (cada dos o cuatro años) y sean actualizados al momento”, concluyó Locatelli. 
Cabe destacar que este curso fue realizado por todos los integrantes de la disciplina emergentología con el objetivo de que los docentes de la Facultad se entrenen con los más altos estándares internacionales en la materia, profundizando así los vínculos y delineando futuras líneas de trabajo con la AHA.