En el marco de la Semana Internacional del Parto Respetado, que se conmemora del 13 al 20 de mayo de 2024, se realizó en la Facultad de Ciencias Médicas (FCM) de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) una jornada titulada “Nuevos enfoques sobre el parto fisiológico y la movilidad pélvica”. En la misma disertaron Nuria Vives Parés, coautora del libro “Parir en movimiento” y Marisa Espinoza, médica y docente FCM-UNL; también participaron como panelistas Miriam Olaizola, Licenciada Obstétrica de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y el Doctor Samuel Seiref, docente FCM-UNL. La jornada destinada a estudiantes y a profesionales de la salud se focalizó en el movimiento de la pelvis como aliada para el parto.

La persona gestante como protagonista

Desde 2015, nuestro país cuenta con la ley 25.929, que busca garantizar los derechos de las personas gestantes durante el embarazo, parto y puerperio. Se propone a través de la misma poner el foco en las necesidades de las personas gestantes. Además, “se promueve el respeto por la fisiología y por los tiempos que tiene el nacimiento. Se busca establecer un vínculo entre todas las personas involucradas en el parto y los protagonistas, para que cada nacimiento adquiera un significado eco social”, sostuvo Marisa Espinoza. Por su parte, Nuria Vives Parés, añadió “se propone volver a recordar que el parto no es una enfermedad, sino que es orgánico y que pertenece a la naturaleza”.

La ley argentina de parto humanizado “busca el respeto y el acompañamiento del nacimiento independientemente de la vía, ya sea por parto vaginal o por cesárea. En esta última, se busca posibilitar que la persona gestante pueda estar acompañada en el quirófano y que se realice el contacto piel a piel del binomio en los primeros minutos de vida”, afirmó Marisa Espinoza. En esa línea, Miriam Olaizola, enfatizó “creo que la cesárea es también un derecho que tiene la mujer, y que salva vidas, no tenemos que estigmatizarla. Existen casos, donde la cesárea tiene una justificación, donde no hay otra alternativa. Sin embargo, también hay que considerar que durante una cesárea el foco y la atención deben estar en la persona gestante, para que pueda vivir la llegada de su hijo/a como un acontecimiento y en un espacio cuidado”.

Nuevos enfoques y paradigma de la atención

Nuria Vives Parés propone la metodología “parto y movimiento” donde los médicos/as y las matronas que acompañan el parto tengan en cuenta que la pelvis de la mujer se encuentra perfectamente adaptada para recibir al bebé y que, para ello, junto a Blandine Calais-Germain, crearon un lenguaje para describir los movimientos que tienen los huesos de la pelvis, para saber cómo se van adaptando al pasaje del bebé. También detallaron cómo posibilitar esos movimientos. Siguiendo este paradigma de trabajo “los/as profesionales que acompañan a la persona gestante, deben poder transmitirle confianza en su propio cuerpo, ayudarla a conectar con el cuerpo, a transitar los cambios y a crear un espacio donde puedan expresar libremente las dificultades que enfrentan”, manifestó Nuria Vives Parés.

El rol de los profesionales de la salud y de las instituciones de salud

“La idea es invitar a los/las profesionales a que promuevan el movimiento libre durante el trabajo de parto, y a que fomenten la confianza en las personas gestantes”, reflexionó Marisa. También invitar a las instituciones al reacondicionamiento de espacios en lugares cálidos y confortables para que las mujeres puedan ser libres para transitar su trabajo de parto y con todos los elementos necesarios”, añadió Miriam. En este contexto, es importante que en la sala de parto la camilla esté fuera del centro de la habitación y que permita que la persona gestante pueda cambiar de posición y moverse, según su propio cuerpo vaya indicándole”, concluyó Nuria.

Acciones en territorio

Desde la Dirección de la Licenciatura en Obstetricia y la Sede Rafaela-Sunchales a efectos de reflexionar sobre la importancia del parto respetado y su impacto en la sociedad, realizaron durante la Semana del Parto Respetado consejería en diferentes puntos de la ciudad de Santa Fe y de la ciudad de Rafaela.